¿Por qué debemos tener autoempatía?

Tal como lo define la RAE, «La empatía es la capacidad de identificarse con alguien y poder compartir sus sentimientos» además, es uno de los requisitos fundamentales para adquirir inteligencia emocional, pues ésta se encuentra relacionada con la comprensión, la compasión, el apoyo y la escucha activa. La empatía y la compasión son valores que se cultivan como parte de las habilidades sociales, pero a menudo los seres humanos carecen de la capacidad para expresar, tanto a nosotros mismos como hacia los demás, por eso es importante que la empatía antes de expresarla hacia afuera, podamos primero compartirla con nosotros mismos.

Háblate con cuidado, cariño y entiende que en la diferencia esta la magia, cuando te conoces, te entiendes.

Háblate con cuidado, cariño y entiende que en la diferencia esta la magia, cuando te conoces, te entiendes.

¿Cómo podemos lograrlo? Para empezar, se deben eliminar los calificativos hacia nuestras acciones, pensamientos y sentimientos; pues al colocar significados errados o asertivos, malos o buenos, valerosos o no, empezamos a tratarnos con tal dureza, donde la posibilidad de ver oportunidad en el error es casi nula, sesgando cualquier buena intención, acto de valentía o bondad, etc; a partir de allí, vamos perdiendo la confianza en nosotros mismos, debilitando nuestra confianza para creer que somos buenos, capaces, aguerridos, valerosos, bellos, merecedores de cosas buenas, entre muchas otras.

 

 

 

 

Al ser los primeros en cuestionarnos desde el juicio, lo único que podríamos esperar es que el mundo se nos presente de la misma manera. De acuerdo a lo anterior, antes de que nos rechacen o nos señalen, ya nos hemos rechazado o señalado a nosotros mismos. Ser empático es tener una percepción sobre los sentimientos de los demás, de allí, la invitación a ser sensible consigo mismo. Al ser personas que gustamos de escuchar, analizar el por qué una persona se siente como tal, es una forma de darle legitimidad a sus sentimientos, la invitación es a que gustes de escucharte a ti mismo, que logres analizar y comprender lo que sientes.

Ser flexibles, tolerantes y bondadosos consigo mismos para reconocer una razón

Ser flexibles, tolerantes y bondadosos consigo mismos para reconocer una razón

En el pensamiento se debe evitar el extremismo, comprender que en los puntos intermedios es donde se presenta la flexibilidad. Se da permiso a la comprensión que legitima ese sentir de la otra persona, al percibir la realidad del otro, se esta validando su propia vivencia. No existe solo el color blanco, ni tampoco el negro, también están los puntos grises. La invitación es a ser flexibles, tolerantes, bondadosos consigo mismos para reconocer una razón, una historia en la cual debe haber enfoque para poder trascender, avanzar y evolucionar.

 

 

 

 

Seamos respetuosos con nuestro sentir, pues al comprender y aceptar los deseos del otro, también podemos reconocer nuestro derecho al espacio propio, para ocuparse de las propias emociones y así comunicar de forma adecuada lo que queremos expresar. Sé bondadoso contigo mismo, quiérete, no guardes rencores ni expreses rabia hacia tu persona o los demás, háblate con cuidado, cariño y entiende que en la diferencia esta la magia, cuando te conoces, te entiendes, y así podrás ayudar a otras personas a que también te conozcan y te comprendan. Inicia por ti.

 

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