Los biopolímeros como un proceso de aprendizaje interior

«El aprendizaje es más efectivo cuando se trata de un proceso activo en lugar de pasivo» Kurt Lewin.

En el reconocimiento como seres sociales podemos comprender el desafío al que nos enfrentamos para lograr equilibrio entre nuestras necesidades de afecto y el legítimo derecho a ser quienes somos.

Y aquí es donde nos queda mucho más clara la frase de Kurt Lewis cuando dice, que el aprendizaje es mucho más efectivo cuando se trata de un proceso activo en lugar de pasivo, en la medida en que seamos mas interactivos con nuestras propias vivencias de manera consciente, tendremos una gran puerta para acceder a ese aprendizaje que nos ayudará a no tropezar de nuevo con la misma piedra.

en la medida en que seamos mas interactivos con nuestras propias vivencias de manera consciente, tendremos una gran puerta para acceder a ese aprendizaje que nos ayudará a no tropezar de nuevo con la misma piedra

La necesidad de aprobación o aceptación en los seres humanos, expresa inseguridad emocional, la cual debemos trabajar con el objetivo de lograr un correcto equilibrio entre nuestra estima y el deseo natural del afecto y la aceptación.

La inseguridad emocional surge de la incomodidad cuando nuestros puntos de vistas o deseos personales discrepan con el de los demás, arriesgando la imagen que deseamos causar, creyendo que perderemos la aceptación por parte de la otra persona, esto desde luego, incrementa los episodios de ansiedad, asociada a la incertidumbre sobre las reacciones que los otros puedan tener, y en esas circunstancias nos sentimos en una encrucijada: expresar o no expresar, ceder o dejarnos llevar por los demás, etc. Por lo anterior, corremos el riesgo de perdernos a nosotros mismos, pues nos volvemos permeables a las opiniones y juicios de los demás, en este punto es supremamente importante el conocimiento de sí mismo para tener claridad sobre quienes somos y deseamos ser.

lograr equilibrio entre nuestras necesidades de afecto y el legítimo derecho a ser quienes somos

Es necesario seguir el propio camino, apartando el ruido exterior de las opiniones, que queden solo en eso, en opiniones y no ejerzan ningún poder sobre nosotros. Aquí, es donde se recupera el poder sobre sí mismo, se adquiere la capacidad para elegir si la crítica aporta de manera constructiva, y en el caso contrario, poder desecharla, se aprende a ser selectivo con la información que se almacena a través de la experiencia, siendo fiel a sí mismo y comprendiendo que el afecto que expresan los demás, no radica en la cantidad, sino en la calidad de la compañía.