Los biopolímeros son sustancias de relleno dérmico, aplicadas de manera frecuente para el aumento del volumen en áreas como los labios, senos, glúteos o mejillas. En la mayoría de los casos las personas que se han inyectado estos productos en su organismo pueden experimentar complicaciones o reacciones adversas a estos materiales.
La hiperqueratosis, también conocida como «cresta de gallo» es una afección de la piel que se caracteriza por el engrosamiento de la epidermis, esta se presenta como una lesión tipo verruga acompañada de enrojecimiento y bastante irritación, su origen radica en la sobreproducción de queratina, una proteína que se encarga de la defensa ante la presión o irritación constante, generando a su vez una respuesta incómoda y dolorosa si no se trata adecuadamente.
El tratamiento para la hiperqueratosis por biopolímeros consiste en retirar la mayor cantidad de producto mediante la técnica abierta, eliminando a su vez la lesión hiperqueratócica, la cual se realiza en forma de elipse, su persistencia sobre el organismo en un porcentaje menor, puede desencadenar un cáncer de piel. Esta intervención quirúrgica se realiza con anestesia local y genera poca incapacidad. Sin duda alguna la recomendación es hacerse el retiro de biopolímeros para evitar que estas lesiones vuelvan a aparecer con mayor intensidad.
La sugerencia que se hace a las pacientes para evitar y tratar esta afección cutánea es el uso de ropa cómoda, hecha con materiales naturales y transpirables como el algodón, esto con el objetivo de evitar la acumulación de calor y sudor en la piel con posibles irritaciones o infecciones, se debe evitar también la exposición prolongada a fuentes de calor intenso como la luz solar directa, los saunas, jacuzzis, turcos, aguas termales etc.
Es importante recordar que las pacientes con biopolímeros ya tienen un grado más de temperatura en la zona inyectada, estos factores promoverán la inflamación y a su vez la resequedad en la piel, por eso es importante la buena hidratación con hábitos como el consumo adecuado de omegas, la ingesta de 2 litros de líquido diarios, la aplicación de cremas a base de urea, lactato y ceramidas para el mantenimiento del manto hidrolipídico. Recuerda que los hábitos saludables son importantes a la hora de prevenir, tratar y mitigar los síntomas por biopolímeros, en este caso la hiperqueratosis.
Si tienes biopolímeros en los glúteos y experimentas resequedad o hiperqueratosis a pesar de tomar las medidas preventivas debes consultar a un experto en retiro de biopolímeros para las recomendaciones personalizadas y tratamientos específicos según las necesidades de cada paciente.